Génova es una ciudad poco conocida de Italia, en comparación con otras. El corazón de esta ciudad siempre ha sido su puerto desde la antigüedad. Su contraste entre lo barroco y lo moderno hacen de sus paisajes naturales una obra de arte.
Además de la fresca comida italiana "á la minute" con un buen vino, y la poca afluencia de turistas hacen de esta joya escondida una verdadera belleza. No te pierdas el acuario de Génova, el casco antiguo, los Palacios de los Rolli y date una subida al monte Righi, desde donde tienes una impresionante vista panorámica.